Los Estados Unidos se está desacelerando el ritmo de la ayuda de seguridad para México en medio de un desastre de derechos humanos que llevó al Departamento de Estado para retener unos $ 5 millones en la ayuda a principios de este año.
El Congreso aprobó el presupuesto premios a principios de este mes más o menos $ 146 millones en ayuda de seguridad para México. Esa cifra es la más baja desde 2011 y asciende a cerca de tres cuartas partes de la financiación Congreso autorizó el año pasado.
"Para un país cercano como México, si su ayuda para un programa se corta el 25 por ciento, que es una muy gran negocio", dijo Robert Naiman, director de política de la organización de membresía Just Foreign Policy. "Según los estándares de Washington, eso es algo muy importante tirón de orejas".
$ 63 millones el año anterior.
El Pentágono no ha dado a conocer las cifras completas para el año pasado o las proyecciones para este año. Pero un informe del Departamento de Defensa bianual que rastrea los fondos antinarcóticos, publicado en abril y publicado en línea por la Oficina de Washington para América Latina, mostró que México sólo había recibido $ 6,8 millones a mediados de 2015. Aunque la mayor parte del dinero por lo general se distribuye en el segundo semestre del año, México apareció en camino de recibir menos dinero de lo que lo hizo en 2014.
No está claro lo que ocurrirá en el 2016, ya que el Departamento de Defensa reasigna sus prioridades de gasto cada año, de acuerdo con Frank Mora, quien se desempeñó como subsecretario adjunto de Defensa para el Hemisferio Occidental 2009-2.013.
"[La ley] les da amplia autoridad para financiar y apoyar a México en sus esfuerzos contra el narcotráfico", Mora dijo a The Huffington Post.
El Departamento de Estado, el Departamento de Defensa y la Casa Blanca no respondieron a las solicitudes de comentarios de HuffPost. Sin embargo, expertos en México apuntan a una serie de razones por las que la ayuda al país está diluyéndose.
Por un lado, el ejército mexicano siempre ha sido cauteloso acerca de trabajar muy de cerca con los EE.UU., y el presidente de México, Enrique Peña Nieto ha mostrado menos entusiasmo por la colaboración que su predecesor, Felipe Calderón.
La importancia cada vez menor de la Iniciativa Mérida, un pacto de seguridad puesto en marcha en 2008 para reforzar el asalto de México en sus carteles de la droga, también ha dado lugar a una caída de la financiación. El Congreso ha autorizado algunos $ 2500 millones para México desde Mérida entró en vigor. Sin embargo, aunque la iniciativa originalmente ayudó a financiar grandes compras de equipos militares y de policía de México, se ha centrado más en la formación y profesionalización fuerzas de seguridad mexicanas en los últimos años.
Sin embargo, algunos expertos también creen problemas de derechos humanos y la falta de fe en las fuerzas armadas de México han jugado al menos algún papel en los recortes presupuestarios.
Organizaciones de derechos humanos han documentado abusos generalizados por los militares y la policía de México, incluyendo desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura. Los abusadores son raramente castigados. Más de 100.000 personas han muerto desde que Calderón lanzó su asalto a los cárteles en 2006, a menudo a manos de militares y policías de México.
El gobierno mexicano enfrenta más críticas por su historial desastroso derechos humanos este año debido a la administración de Peña Nieto ha sido acusado de mal manejo de la investigación sobre la desaparición de 43 estudiantes a manos de la policía en Iguala, México.
Los periodistas independientes, expertos forenses y un panel de expertos envió por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han todos rechazada la cuenta del gobierno de lo que sucedió a los estudiantes, y documentos del gobierno indican que las autoridades mexicanas torturados testigos clave en el caso, incluyendo a cuatro personas que los fiscales dicen que confesaron haber matado a los estudiantes.
El escape de este verano del capo del país más notorio de drogas, Joaquín "El Chapo" Guzmán Loera, en aparente colusión con las autoridades penitenciarias, también socavó la confianza en el gobierno mexicano.
Funcionarios estadounidenses casi nunca critican a sus contrapartes mexicanas públicamente, en parte por la preocupación de alienar a un aliado estratégico con el que los EE.UU. comparte una frontera de 2.000 millas.
La caída en el apoyo a México es casi seguro que sea más dramático si no fuera por un fuerte aumento en el número de madres y niños centroamericanos que cruzan a los EE.UU. en los últimos años. El Congreso autorizó un extra de $ 79 millones por encima de la solicitud de la Casa Blanca en 2014 para reprimir a los cruces ilegales a través de las fronteras de México con Guatemala y Belice. El presupuesto de 2016, una vez más encabeza la petición de la Casa Blanca - esta vez, por algunos $ 24 millones - en parte porque incluye fondos para asegurar la frontera sur de México.
Sin embargo, el Departamento de Estado se negó a emitir un informe de este año sobre los avances que México ha hecho en materia de derechos humanos, un requisito para el desembolso de 15 por ciento de la financiación de México recibe bajo la Iniciativa Mérida. La decisión sólo costó México $ 5 millones, según The Washington Post, pero encontré como un reproche.
Adam Isacson, analista de la Oficina de Washington para América Latina, que rastrea la ayuda extranjera a México, dijo que los escándalos de derechos humanos este año han hecho que los funcionarios estadounidenses más cauteloso acerca de quién recibe los cientos de millones de dólares en ayuda extranjera al país.
"El tema de los derechos humanos es una sombra se cierne sobre la cooperación de Estados Unidos con la policía mexicana y las fuerzas militares", dijo Isacson HuffPost.
Shannon O'Neil, un alto miembro del Consejo de Relaciones Exteriores que investiga México, ofreció una evaluación similar. Sin embargo, agregó que los funcionarios y los legisladores tendrían que sigan cooperando con el gobierno de Peña Nieto para mantener la influencia y presionar a México para mantener medidas enérgicas en su frontera sur, un tema que ha ganado la atención como los jefes de Estados Unidos en una elección presidencial.
"Yo hago pensar en los retos que se han hecho más difícil apoyar México", dijo O'Neil HuffPost. "¿Es usted tira hacia atrás todos los fondos o ves esto como una oportunidad para invertir en realidad y crear un cambio?"
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